Técnicas probadas para mejorar la productividad en su oficina
La oficina es el lugar donde los empleados pasan la mayor parte del tiempo. Pero, si no están contentos con el lugar de trabajo, se notará en su productividad. Esto dificulta no solo su rendimiento, sino también su promesa de cumplir los plazos de los clientes.
Los empleados deben sentirse motivados cuando vienen a trabajar. Y no cuesta una fortuna darles esa motivación sólo si puede retocar algunas cosas aquí y allá. ¿Quiere saber qué puede hacer que las cosas funcionen?
He aquí cinco técnicas probadas que pueden aumentar la productividad de los empleados en la oficina:
1. Utilizar herramientas de seguimiento del tiempo
Las recompensas animan a todos a trabajar más. No hace falta comprar el último teléfono móvil para tenerlos contentos. Basta con agradecer su trabajo delante de todos y entregarles un pequeño regalo. Eso es suficiente para mantenerlos motivados durante la semana siguiente.
Pero antes de eso, hay que darles herramientas de seguimiento del tiempo o aplicaciones de seguimiento de la productividad para que puedan medir el trabajo que les queda en la semana. Cuanto más rápido terminen, más posibilidades tendrán de ser reconocidos delante de todos. También puedes hacer un seguimiento de los empleados para comparar la productividad de los que más trabajan.
2. Mantener el lugar de trabajo limpio y ordenado
Aunque también es responsabilidad de los empleados mantener su lugar de trabajo limpio y despejado, usted debe tomar la primera iniciativa. Contrate a profesionales para que limpien el vestíbulo, los escritorios, los techos, las paredes, la despensa, los lavabos, etc. y pida a todos que los mantengan libres de manchas.
3. Programar un receso fijo
Los empleados suelen saltarse la comida porque tienen que terminar un trabajo urgente. Establezca la norma de que, por muy urgente que sea el trabajo, todos deben almorzar a una hora fija. Y, no solo a la hora de comer, los empleados también deben tener un receso cada 90 minutos.
La productividad en el trabajo no significa que el empleado tenga que estar en su mesa durante ocho horas seguidas. Necesita relajar su mente para poder concentrarse de nuevo en el trabajo.
4. No pidas a los empleados que hagan varias cosas a la vez
Segregar el trabajo es otra de las tareas esenciales de un directivo. No sobrecargue a sus empleados con diferentes proyectos y espere que realicen varias tareas. Muchos empleados se confundirán y, como resultado, entregarán un trabajo de baja calidad al final del día.
Dales el tiempo y el espacio necesarios para completar un proyecto antes de encargar otro. La multitarea no es para todos, así que no obligues a tus empleados a hacer lo que no saben hacer.
5. Compruebe de vez en cuando cómo están los empleados
Mantener una relación mandona con los empleados creará una distancia. Esa no es la señal ideal para mejorar la productividad en el trabajo. Debes comprobar cómo están los empleados y saber qué pasa en su vida personal, como qué tal les va a sus hijos en el colegio, si sus padres están bien, qué hacen los empleados en el fin de semana, etc.
Hay una vida más allá del trabajo, y hay que hablar de esas cosas para garantizar un lugar de trabajo agradable.
Conclusión
Mejorar la productividad en el trabajo no es una tarea ingente. Hay que entender las cosas desde el punto de vista de un empleado para mejorarlas.