Formas sencillas de mejorar la calidad de su flujo de trabajo en su oficina en casa
Incluso en esta época moderna, trabajar desde casa es considerado un lujo por muchos. Esto se debe a que la gente piensa que el trabajo sólo puede realizarse en un entorno de oficina «real». Pues bien, hoy en día sabemos que eso no es cierto. Hay decenas de personas que gestionan todo su trabajo de oficina sentadas cómodamente en casa. Gracias a la era de Internet, tenemos una tonelada de oportunidades que aprovechar sólo desde nuestros hogares.
Sin embargo, no todo es acogedor, fino y mágico. Trabajar desde casa tiene sus ventajas evidentes, pero también hay algunos inconvenientes. A veces puedes ponerte demasiado cómodo para poder hacer algo de trabajo real. Esto puede llevar a un descenso de la productividad en ocasiones.
De repente, trabajar en un entorno de oficina en casa no parece tan increíble cuando tienes una tonelada de trabajo pendiente acumulado. Tampoco ayuda el hecho de que tu «oficina en casa» no tenga el equipamiento adecuado que tendría una oficina real.
Con el paso del tiempo, mucha gente tiene problemas para realizar correctamente su trabajo desde casa. Le daremos 4 consejos para mejorar la calidad del flujo de trabajo en un entorno de oficina en casa. Sigue leyendo para aumentar la productividad.
1. Establezca el entorno adecuado
Trabajar desde casa tiene sus ventajas. Sin embargo, mucha gente cree que es tan sencillo como coger el portátil, tumbarse en el sofá y «trabajar» con una película de fondo. Esto no contribuye en absoluto a tu flujo de trabajo. Lo que realmente hace es disminuir tu productividad e incluso tu creatividad. La distracción llega antes de lo que crees cuando estás en la comodidad de tu casa. Así que el entorno adecuado es importante.
En primer lugar, busca un lugar limpio y tranquilo para trabajar. No es la mejor idea trabajar en un lugar ruidoso y desordenado. Un lugar desordenado te dejará distraído y desconcentrado. Un escritorio limpio y organizado te ayudará mucho. Un entorno tranquilo también es útil. No te decimos que te aísles por completo, pero un poco de paz y tranquilidad te hará estar más concentrado.
La iluminación adecuada es otro aspecto importante que mucha gente pasa por alto. Una habitación aburrida con poca o ninguna luz puede dejarte con dolor de cabeza y no serás productivo durante mucho tiempo. Tu pantalla no debe ser tu única fuente de luz. Consigue una lámpara para tu escritorio o intenta que entre luz natural a través de las ventanas.
2. El equipo adecuado
Los principiantes que se inician en el trabajo desde casa creen que pueden hacer el trabajo sólo con su viejo portátil y una escasa cantidad de herramientas (o la falta de ellas). Pero no es así. Una vez que hayas conseguido el ambiente adecuado y estés listo para trabajar, el siguiente paso es conseguir el equipo adecuado.
Las cosas que necesitas dependerán, obviamente, de los criterios de tu trabajo. Si manejas mucho papeleo, abastécete de archivadores, carpetas, sobres y organizadores. Hazte con un planificador que te ayude a organizar toda tu carga de trabajo. Salir corriendo en medio de un proyecto importante sólo para coger un bolígrafo estropea mucho tu estado de concentración.
Si te encuentras corriendo constantemente a un cibercafé o a algún lugar similar, sólo para imprimir algo, es hora de invertir en una buena impresora. Sinceramente, te servirá de mucho cuando puedas acceder a todo tu papeleo en un instante. Te recomendamos que optes por una buena impresora láser. Es una inversión única y te lo agradecerás después. ¿No puedes decidirte por una?
3. Toma un poco de aire
El mundo de los números y las cifras puede desconectarte del mundo real. Personalmente, podemos estar de acuerdo con esto también por nuestra parte. En un trabajo que requiere mucha investigación y escritura, la creatividad es clave. La creatividad se esfuma cuando estás sentado en el mismo sitio durante horas. Una bocanada de aire fresco es una solución fácil para esto.
¿Te encuentras todo el día haciendo números? Hemos visto a gente volverse absolutamente frenética en un lugar así. Una buena pausa de 10-15 minutos debería arreglar eso con seguridad. Si es imposible hacer una pausa o tomar un descanso, se recomienda un cambio de escenario. Si es posible, sal a trabajar fuera, por ejemplo en un balcón o en una cafetería, durante un rato.
La música también es útil dependiendo de la persona. Evidentemente, no se trata de volverse loco con nuestras canciones favoritas. Pero considere la posibilidad de poner una música suave de fondo que le ayude a relajarse un poco. Algunas personas encuentran que esto realmente ayuda, mientras que otras no han notado una diferencia real. Es una cuestión de preferencia personal.
4. Una buena conexión
Por último, pero no por ello menos importante, consigue una conexión a Internet adecuada. Al trabajar desde casa, imaginamos que tienes que estar mucho tiempo en contacto con tus compañeros o jefes. Aunque no sea el caso, navegar por el correo electrónico, investigar en Internet y guardar archivos en la nube requieren una buena conexión a Internet.
Hemos perdido la cuenta del número de veces que una mala conexión a Internet ha estropeado nuestra rutina. La frustración y el estrés derivados de una mala conexión a Internet son una enorme interferencia cuando intentas concentrarte. Así que antes de hartarte y tirar el ordenador por la ventana, intenta acceder a Internet con una conexión estable y de buena velocidad.